Cuphead es un juego de acción y plataformas que basa su jugabilidad en los combates contra jefes, siendo estas fases la grandísima mayoría en el juego. La mejor de tus concentraciones será necesaria para este desafiante reto, que no solo pondrá a prueba tu habilidad, sino que también tu paciencia. Y te puedo asegurar que lo va a hacer.
Contexto
Cuphead fue desarrollado y distribuido por StudioMDHR en el 2017. Ellos solo han publicado hasta la fecha, el juego principal de Cuphead y un breve DLC del mismo, el cual salió cinco años después (2022). Actualmente está disponible para todas las plataformas habiéndolas añadido a lo largos de los años.
Lo que más llama la atención de este juego es su tan trabajado apartado artístico, refiriéndome a la parte visual y sonora. Para empezar, la animación Cuphead se inspira en los dibujos animados antiguos (1930), utilizando técnicas de dibujo a mano, con un aproximado de 50000 frames.
Además, Cuphead ha sido galardonado con varios premios, como el Game Award al juego indie del año y otros tantos en relación a su característica animación.
Premisa
Cuphead y su hermano Mugman pierden todo su dinero al apostar en el casino del diablo, sin embargo, este les propone un trato: recoger todos los contratos de alma que le deben en todas las islas del mundo.
Ellos sin muchas más opciones aceptan el trabajo, aunque no será tarea fácil, ya que los morosos no se van a dejar derrotar por mucho que pidas.
Gameplay
Como ya he mencionado anteriormente Cuphead, es un juego que se centra en los combates contra jefes y, en ocasiones, puede recordar a un bullet hell por la cantidad de «mierda» que tienes en pantalla. La acción transcurre en mapas estáticos en la mayoría de ocasiones, sin contar los mapas aéreos y los run and gun, por razones evidentes.
Si hay algo que podemos afirmar es que, en cuanto a las mecánicas, Cuphead es muy simple, solo tienes que moverte y disparar. Aparte de esto no hay mucho más, no tienes niveles, ni muchas habilidades complejas. Simplemente unos cuantos tipos de disparos entre los que elegir sin restricciones y algunos amuletos que te añaden algunas pasivas.
Es cierto que, de la mano de los disparos, vienen los especiales y los súpers. Pero ninguno de estos es muy complejo y tendrás que limitarte a saber los que quieras usar, no hay obligaciones, salvo las que tú te impongas.
Apartado técnico
La parte del rendimiento está muy cuidada, cero fallos he sido capaz de encontrar, ni bugs, ni ningún otro problema del estilo. Además, en cuanto a los FPS, tampoco he sentido nada raro y no son pocas las cosas en pantalla, por lo que bien.
Por la parte gráfica, ya habiendo mencionado el estilo que tiene, decir que me parece una pasada. Sin duda está muy bien conseguido, teniendo detalles en todas partes: el mapa, los enemigos y por supuesto, en las zonas de peleas.

Para finalizar tenemos el apartado sonoro, el cual, junto a lo visual, crean una atmósfera perfecta en la que recoger todos y cada uno de los contratos. Los sonidos están muy bien elegidos e implementados y la banda sonora es otra maravilla que encaja a la perfección en cada situación y jefe.
Lo peor
Dasheas a comerte daño
En este juego el dash no es a lo que estamos acostumbrados, siempre que esquivamos, durante ciertos segundos del dash no puedes recibir daño. Sin embargo en el Cuphead, sí que recibes el golpe, por lo que, en muchas ocasiones, al intentar evitar el daño, estaremos yendo de frente contra el jefe y conseguiremos justo lo contrario.
Por suerte, existe un amuleto que lo transforma en una bomba de humo, y si bien no hace daño, te permite atravesar enemigos y proyectiles mientras dasheas sin recibir daño. Con esto parece que el problema estaría resuelto, pero el hecho de estar «obligado» a llevar este amuleto te limita a no probar otras cosas.
Con todo esto tienes dos opciones: enfrentarte a los jefes con un esquive, que más que un esquive es un deslizamiento, o quedarte con el amuleto de la bomba de humo y jugar al juego.
El parry es una fumada
La mecánica del parry en Cuphead solo la puedes hacer a los proyectiles y enemigos rosas, por lo que no la podrás usar para evitar daño de normal ni para devolverlo. Lo único que hace es generar carga de tu ataque especial, lo que no está mal.
Lo malo aparece cuando te das cuenta de que para poder hacer un parry tienes que haber saltado primero, ya que el parry se ejecuta estando en el aire. Recordemos que el juego está repleto de momentos en los que se te llenará la pantalla de proyectiles y que estos vienen de muchas partes distintas, como por ejemplo desde arriba ¿hay algún problema en que vengan desde arriba?
Pues sí, y no es un problema, es EL PROBLEMA. Tenemos una mecánica que solo se puede usar durante un salto y un salto que no se puede controlar, es decir, el salto siempre se hace al máximo. Juntando esto llegas a la resolución de que no es instantáneo, no puedes reaccionar rápidamente a un parry si lo tienes muy cerca o te viene desde arriba, porque la mayoría de las veces vas a comértelo directamente.
La tienda
A lo largo del juego tendremos la oportunidad de hacernos con disparos y amuletos nuevos gracias a las tiendas repartidas por las islas. El tema es que el catálogo de las tiendas es siempre el mismo y está muy reducido, por lo que estás obligado a comprar lo que ves aunque no lo quieras, para poder comprar los productos que ponga después.

Lo mejor
Variedad de jefes
El juego base de Cuphead tiene un total de 28 jefes que derrotar, más los añadidos posteriormente con el DLC, que son 12, juntando 40 jefes entre el juego base y el DLC. A parte del gran número de ellos hay que añadir que cada uno tiene estilo propio.
Las mecánicas del juego están muy bien trabajadas para los jefes y sus escenarios. Contra algunos serán mejores unas armas que otras, en otros enfrentamientos tendrás que centrarte en los parries y quizás en otros tantos es mejor saltar. Digamos que, además del estilo único de cada uno de ellos, los combates son igual de únicos y originales.

Jugabilidad variada
En añadido al gran número de jefes, tenemos algunas fases que se basan en seguir avanzando por el mapa, al más puro estilo de correr y disparar. En estos mapas el plataformeo es esencial, al igual que el control sobre el gran número de enemigos que estos niveles tienen.
También tenemos las fases aéreas, que si bien no dejan de ser un pelea contra un jefe, se aleja bastante de las fases normales. Para empezar, no tendremos disponibles los disparos estándares, los cuales son sustituidos por misiles y bombas.

Sí que es cierto que no hay posibilidad de cambiarlas, limitando la forma de abatir al jefe y eliminando la personalización de las armas según tu estilo. No obstante, esto no es un problema, por el hecho de que estas fases están muy centradas en el planteamiento bullet hell, vamos que te centres en esquivar.
En definitiva, con las diferentes misiones y con la posibilidad de combinar las armas y amuletos a placer, conseguimos mil maneras de enfrentarnos al juego.
DLC
Como ya he mencionado antes, el DLC añadió doce jefes nuevos, además de introducir un nuevo personaje: Ms. Chalice, y una breve pero nueva historia. Introducido esto, ¿recordáis los problemas del parry y el dash? Pues el DLC «se los mete por el culo».
Y es que Ms Chalice cambia el juego por completo, cambiando el parry del salto por un dash que aplica el parry, permitiendo así una rápida reacción ante los proyectiles cercanos; teniendo también un dash con el que no recibes daño al rodar; un punto más de vida; y por último, añadirle a mi colega un doble salto.
Todo esto simplemente equipándonos el amuleto que nos cambia a este personaje, una auténtica gozada. En adición a esto, añadir que los jefes introducidos en esta expansión, son notablemente más complicados y largos que los del juego base. Además de tener un diseño de nivel muy enfocado en Ms Chalice, siendo ella, la mejor opción de cara a afrontar este DLC.

Conclusión
Cuphead nos ofrece una acción super frenética y divertida, a la vez que desafiante, todo ello a cambio de nuestra salud y estabilidad mental. Es un juego complicado, todos los jefes y fases tienen lo suyo y si bien algunos pueden no plantearte un problema, seguramente otros te darán más de uno.
Por lo que paciencia a la hora de afrontar este reto, que aunque Ms Chalice esté muy bien para la isla de la expansión, no será tan claramente superior en las islas del juego base, por lo que no hagas «trampa» y dale una oportunidad a Cuphead y Mugman.
Opiniones del autor
En lo personal Cuphead es un juego del que me voy a acordar por mucho tiempo, además de ser mi objetivo de platino ahora mismo. Con esto quiero decir que, pese a que me moleste mucho el daño por contacto —que joder si lo hace—, la experiencia con todos los jefes ha sido increíble. Habiéndome gustado la grandísima mayoría de ellos, a excepción de King Dice, por ser una pelea aburrida y frustrante por el uso del parry.

Este juego era uno de los que tenía en la mira desde hacía ya tiempo y me alegro de haber podido completarlo, al igual que el DLC. Y, en mi opinión, otra cosa muy positiva de este juego es el precio del mismo, ya que, al momento del análisis, está a unos 27€ completo.

El detalle de cada mapa, lo bonito de cada pieza musical y lo único de la animación convierten a Cuphead en una experiencia maravillosa, que además, teniendo en cuenta su precio, la convierte en asequible para muchos bolsillos.
¿A quién recomendaría este juego?
Cuphead es un juego para los intensitos, para los que dicen ser «true gamers» para luego quejarse de lo difícil del juego en la primera isla, para todos aquellos que disfruten de un buen reto y sobretodo para los que sean capaces de mantener la cabeza fría y no dejarse llevar por el demonio. Este juego es difícil y no es para todo el mundo, pero si estás dispuesto a vivir la experiencia te deseo la mejor de las suertes. Y recuerda, nunca hagas tratos con el demonio, o lo acabarás pagando caro.

