¿Quién no conoce Pokémon, posiblemente la franquicia más rentable en toda la historia de los videojuegos, una de las gallinas de oro de Nintendo la cual, aunque sigue vendiendo más que nunca, cada vez hay más gente que rechaza sus videojuegos? Y es que desde hace mucho tiempo no encontramos una buena entrega de Pokémon, desde la indecisión por mantener una mecánica que cambie los combates —llevando ya hasta la fecha 4 cambios distintos— la falta de cariño que se vio desde Pokémon X e Y, y continuando con peores historias más enfocadas a un público cada vez más infantil. Muchos fans de esta franquicia le acabó perdiendo el cariño por estos motivos.
Aquí es donde entra Monster Crown que, siguiendo con una estética como la de la primera generación de Pokémon, te entrega un juego con el motor de Unity, un pixel art del estilo antiguo, música hecha con bits y una historia donde los Monstruos no son tus amigos, sino realmente seres peligrosos, a los cuales no tienes que entrenar, sino domar para poder sobrevivir en un mundo que realmente es más adulto que el Pokémon normal.
Contexto
Monster Crown es un RPG por turnos hecho a la antigua, desarrollado por el Estudio Aurum y editado por Soedesco, buscando entregar una interpretación y experiencia más madura, de lo que supondría convivir con seres bestiales con conciencia y poderes. Es el primer juego de la desarrolladora, que también decidió entregar un formato de cartas así como lo tiene Pokémon.
Premisa
Todo empieza en una pequeña casa apartada del resto del mundo. Tu personaje, después de haber rellenado un formulario, recibe su primer monstruo. Siendo estos tan peligrosos como son, tus padres deciden enseñarte un poco el arte de ser domador de monstruos. En cuanto te adecúas a todo lo que tiene que ver con este mundo, das tus primeros pasos en una aventura que se dirige a descubrir el mundo, luchar contra mafias, conocer reyes o incluso luchar por la paz de los reinos.

Gameplay
El mapa, a diferencia de los juegos de Pokémon, sí que tiene una buena parte de mundo abierto. Cierto es que aun así puedes encontrar zonas bloqueadas tras la necesidad de conseguir una habilidad para sortear los obstáculos. A lo largo de todo el mapa, encontrarás a los Monstruos, los cuales aparecen directamente en el mapa y buscarán atacarte en muchas ocasiones, consiguiendo que a veces te rodeen y no puedas esquivar las batallas contra estos.

A la hora de la batalla, el juego cuenta con poca variedad de tipos. En este caso, solo 5 de ellos, y cada tipo cuenta con una fortaleza y una debilidad, infringiendo un daño normal al resto de los tipos. Los movimientos para atacar o defenderse suelen tener uno de estos 5 tipos. Además de ello, hay separación del daño entre ataque mágico y ataque físico, por lo que las defensas también se separan en estas dos ramas. Para esto tienes una mecánica de cambio que potenciará los ataques según cambies entre monstruos en combate. La cantidad de Monstruos que puedes llevar contigo son 8, y para poder capturarlos necesitarás pactos, que se podrán comprar en cualquier tienda. Cuanta menos vida tenga el monstruo a capturar, más fácil será que acepte el pacto y se te una.
Por último, está la crianza, la cual toma una gran importancia, puesto que las estadísticas son muy importantes. Pero no solo la crianza ayuda a mejorar las estadísticas de los Monstruos, sino que ayuda a cambiar el tipo, gama cromática, forma y movimientos, cosa que es necesaria debido a que el juego acaba escalando mucho respecto a estadísticas y nivel, obligándome a grindear en algún punto de la historia.

Apartado técnico
Este puede ser el mayor problema. Yo he llegado a perder partidas avanzadas por un bug, y no son pocos los bugs que hay, desde que el juego no se pause siempre que entras en el menú, que te puedan atacar y entrar en combate cuando tu Monstruo está aprendiendo un movimiento, que el movimiento sea extraño en varias ocasiones, que el almacenamiento de Monstruos se corrompa, y un largo larguísimo etcétera.
Respecto a los gráficos, son pixel-art , un poco referenciando a los primeros juegos de Pokémon, una paleta de color un poco apagada y unos diseños que verdaderamente resaltan el entorno que propone el juego. La banda sonora es decente, es cierto que es música de 32 bits, pero te va a hacer añorar los viejos juegos de Pokémon.
Lo peor
Niveles
El juego está desbalanceado respecto a los niveles. Consigues derrotar a un líder que está a nivel 20 para darte cuenta de que el siguiente está solo unos pocos niveles por encima, y el siguiente está más nivelado, aunque aún no ha pasado nada en la historia como para darte tal cantidad de experiencia. Por ejemplo, la rival pasa del nivel 40 al 60 en unos 10 minutos de gameplay, sin ningún tipo de historia de por medio, pero es que además tiene unas estadísticas de vida muy elevadas. Por ejemplo, nada más pasar la historia acabando con un Monstruo nivel 60 y con 180 de vida —bastante más vida de lo que tú tendrás a ese nivel si no farmeas durante un buen rato— para que justo después aparezca un jefe a nivel 80 y 600 de vida, simplemente desbalanceado.
Bugs
El juego no está tan mal de bugs, pero es cierto que unos cuantos parches atrás el juego estaba fatal. Y aun a día de hoy hay fallos que te pueden estropear bastante la experiencia de juego, y no es como si esto se resolviera rápido. Un fallo tan grande como no poder cambiar tu equipo tardó más de medio año en solucionarse, por ejemplo, y eso que esto te impedía reproducir a las bestias, una mecánica principal.
Falta de tutoriales
Hay momentos en los que el juego no te ayuda para nada con mecánicas complicadas como la reproducción o el farmeo de experiencia, siendo esta muy sencilla pero, por ejemplo, no te explica para qué sirven muchas de las opciones que te permite tener el juego. Como la fusión, que es parecida a la reproducción, pero no te avisa de que pierdes a los dos padres.
Lo mejor
No me gusta que me traten como a un crío
Y la historia ayuda bastante a que esto no pase. Te deja tomar decisiones importantes que van a influir en cómo acaba la aventura y, además, la tesitura es mucho más siniestra y oscura, con asesinatos, armas, guerras, sin contar que la personalidad de los Monstruos es más realista. Los pactos son contratos a cumplir por las dos partes, y estos se llevan a juicio si alguna de las dos partes lo incumple Los Monstruos, además, tienen objetivos propios como puede ser hacerse más fuertes.
Los diseños
Los monstruos tienen un buen diseño. Y de los 200 base que hay, cada uno tiene varias formas dependiendo del tipo. Por ejemplo, un monstruo de tipo inestable tiene otras cuatro variantes cuando cambia de tipo, y después están las fusiones que añaden aún más diseños chulos.
Peleas descafeinadas
Las peleas son usualmente más sencillas de lo que parece: el monstruo con más estadísticas y ventaja de tipo gana. Esto ayuda mucho a disfrutar de la historia y las sensaciones que aporta el juego. Además, capturar es sencillo, así que se pueden conseguir fácilmente todos los Monstruos base.

Conclusión
Monster Crown es un juego que tiene mucho potencial. Tiene muchas cosas buenas, pero a la hora de la ejecución deja que desear. Creo que si sacan una secuela donde de verdad esté pulido el juego y lleven a más las buenas ideas que tienen, podrían darle unas cuantas lecciones a una franquicia tan grande como lo es Pokémon.

Opiniones del autor
Adoro Pokémon. Fue mi franquicia favorita durante toda mi infancia y aun le tengo mucho cariño, pero me duele ver como poco a poco van matando la fórmula con entregas que, a diferencia del resto de franquicias de Nintendo, carecen de amor. Intentan cosas nuevas y, aunque funcionen, las quitan para introducir algo nuevo que en verdad es casi lo mismo, con historias que desde hace mucho no se la juegan. Y Monster Crown, aunque creo que le falta mucho para estar a la altura incluso del peor juego de Pokémon, sí puedo percibir ese amor del que Pokémon hace gala por su escasez desde hace un tiempo.
¿A quién le recomendaría este juego?
¿Te gusta Pokémon? ¿Estás como yo, frustrado de que no estén dando el nivel en sus entregas? Pues Monster Crown tampoco da el nivel, pero tendrás algo nuevo que promete mucho, así que ignora que el juego sea un bug andante y disfruta de cómo la historia, los diseños y la ambientación te da lo que un Pokémon no.
